Desafíos Económicos Globales Post-Pandemia: Alertas del Fondo Monetario Internacional

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado una actualización preocupante sobre la economía global, destacando desafíos significativos incluso después del fin de la pandemia de Covid-19 y la crisis desencadenada por la invasión de Ucrania por Rusia.

Según el informe “Perspectivas de la Economía Mundial”, los países se están recuperando gradualmente, pero muchos desafíos aún persisten, según Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del FMI.

El “Perspectivas de la Economía Mundial” (WEO, por sus siglas en inglés) es una de las publicaciones más importantes del Fondo Monetario Internacional (FMI). Proporciona análisis detallados y previsiones sobre la economía mundial, incluyendo las perspectivas de crecimiento económico, inflación, balanza de pagos, tipos de cambio y otras variables económicas importantes.

El WEO se publica dos veces al año, coincidiendo con las reuniones semestrales del FMI y del Banco Mundial. La publicación se basa en un análisis exhaustivo de datos económicos globales, incluida la información recopilada de países miembros, organizaciones internacionales y otras fuentes fiables.

Además de las previsiones económicas, el WEO también ofrece análisis detallados sobre temas económicos específicos que son relevantes para la economía global. Estos pueden incluir cuestiones como políticas fiscales, políticas monetarias, desarrollo económico, desigualdad de ingresos, comercio internacional, entre otros.

El WEO es ampliamente utilizado por gobiernos, instituciones financieras, empresas y académicos como una fuente fiable de información y análisis sobre la economía global. Sus previsiones y análisis influyen en las políticas económicas y las estrategias de inversión en todo el mundo.

Es importante señalar que, aunque el WEO es altamente respetado y ampliamente utilizado, las previsiones económicas están sujetas a incertidumbres y riesgos, y las condiciones económicas reales pueden diferir de las previsiones hechas en el informe. Sin embargo, el WEO sigue siendo una herramienta valiosa para entender las tendencias y los desafíos de la economía global.

Según el FMI, hay cuatro aspectos en los que los países deben concentrarse:

  1. Caída en el Crecimiento Económico

La caída en el crecimiento económico, también conocida como desaceleración económica o recesión, es una situación en la que la economía de un país experimenta un declive en la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), que es la medida más común del desempeño económico de un país.

Existen varias razones que pueden llevar a una caída en el crecimiento económico, como la desaceleración global, política monetaria restrictiva, política fiscal restrictiva, choques externos, endeudamiento excesivo, baja productividad, entre otros.

La desaceleración económica puede tener varias consecuencias negativas, como aumento del desempleo, reducción de los ingresos familiares, caída en las ganancias de las empresas, aumento de la pobreza y de la desigualdad social. Por lo tanto, los gobiernos a menudo implementan políticas para estimular el crecimiento económico, como la reducción de las tasas de interés, el aumento del gasto público, incentivos fiscales y reformas estructurales para mejorar la productividad y la competitividad de la economía.

La economía global enfrenta la perspectiva de un crecimiento menor en 2023 y 2024 en comparación con 2022, con proyecciones indicando una desaceleración de 3,5% a 3% en ambos años. Esta desaceleración se atribuye al endurecimiento de las políticas monetarias para combatir la inflación, principalmente en las economías desarrolladas. Mientras que los países emergentes, especialmente en Asia, deben acelerar su crecimiento, América Latina y el Caribe enfrentan una caída más pronunciada.

  1. Desafío de la Inflación

La inflación es un concepto fundamental en la economía que se refiere al aumento general y continuo de los precios de bienes y servicios en una economía a lo largo del tiempo. Generalmente se mide mediante índices de

precios, como el Índice de Precios al Consumidor (IPC) o el Índice de Precios al Por Mayor (IPM), que rastrean la variación de precios de una canasta representativa de bienes y servicios.

Mantener la inflación bajo control es uno de los principales objetivos de política económica para la mayoría de los gobiernos. La inflación excesiva puede tener efectos negativos en la economía, incluyendo la reducción del poder adquisitivo de los consumidores, la incertidumbre en los negocios y las inversiones, y distorsiones en la asignación de recursos.

Por otro lado, una inflación muy baja o deflación (caída general de los precios) también puede ser problemática, ya que puede llevar a los consumidores a posponer sus compras en expectativa de precios aún más bajos en el futuro, lo que puede desacelerar la actividad económica.

Por lo tanto, los bancos centrales y las autoridades monetarias generalmente buscan un equilibrio, apuntando a una tasa de inflación estable y moderada a lo largo del tiempo. En muchos países, el objetivo de inflación es de alrededor del 2% al 3% anual.

Reducir la inflación es otro desafío global destacado por el FMI. Aunque los índices de inflación al consumidor han disminuido en comparación con el año anterior, el núcleo de la inflación (que excluye productos volátiles como alimentos y energía) permanece alto en las economías avanzadas, señalando la continuidad de las presiones inflacionarias.

  1. Garantía de la Estabilidad Financiera

La estabilidad financiera es una condición en la que el sistema financiero de una economía es capaz de funcionar de manera eficiente y resiliente, sin perturbaciones significativas que puedan causar crisis económicas o financieras. Es esencial para promover el crecimiento económico sostenible y proteger la integridad del sistema financiero.

Mantener la estabilidad financiera es un desafío continuo que requiere cooperación entre gobiernos, bancos centrales, reguladores financieros, instituciones internacionales y el sector privado. La falla en asegurar la estabilidad financiera puede resultar en crisis económicas devastadoras, como la crisis financiera global de 2008, que destacó la importancia crítica de este objetivo para la salud y la resiliencia de las economías modernas.

El FMI advierte sobre la necesidad de asegurar la estabilidad financiera, especialmente después de las turbulencias en algunas instituciones bancarias en EE.UU. y Suiza. Los bancos centrales deben continuar enfocándose en la estabilidad de precios y fortalecer la supervisión financiera y el control de riesgos, mientras que los gobiernos deben construir amortiguadores fiscales para apoyar a los más vulnerables.

  1. Recuperación del Poder de Compra

El poder de compra es la capacidad que tiene un consumidor para adquirir bienes y servicios con una determinada cantidad de dinero. En otras palabras, es la cantidad de bienes y servicios que se pueden comprar con una cierta cantidad de moneda.

A pesar de los desafíos, hay una perspectiva positiva con respecto a la recuperación del poder de compra, con la previsión de aumentos reales en los salarios, especialmente si los mercados laborales permanecen fuertes. Esto puede significar un alivio para los trabajadores de todo el mundo, aunque es necesario un equilibrio para evitar presiones inflacionarias adicionales.

Aunque hay señales de recuperación, el FMI destaca la importancia de permanecer vigilantes ante los desafíos económicos globales, adoptando políticas efectivas para asegurar una recuperación económica sostenible e inclusiva.